Tiempo Presente.

Se sentia como una tonta en el club de lectura, viendo pasar a sus miembros experimentados con libros gruesos y de titulos que no reconocia. Violet torcio sus labios, sintiendose mal, confundida y arrepentida de haberse unido.
Con duras penas reconocia libros clasicos, a veces llegaba a leer libros para jovenes adultos y los dejaba cuando detestaba a sus protagonistas: lo que ocurria el 90% del tiempo, odiaba lo planas y perfectas que eran fisicamente. Y esto viene de una chica vanidosa, que la mayoria llamaria voluble y falsa. Ironicamente, su falsedad, al arreglarse, era un trato mas real de lo que ellos podrian tener en sus vidas.
Le habia dado verguenza que todos comentaran con una facilidad el ultimo libro que habian leido en menos de una semana, y ella a duras penas avanzaba por las noches alguna de sus sugerencias. Si no eran sus personajes, eran las tramas que le hacian dormir, tal vez si era una chica tonta al final del dia. Suspiro, alejandose de la vista del resto, esperando evitar una pena.
La biblioteca era grande, un lugar en donde perderse y que en una epoca de tecnologia, sigue siendo actualizada en su contenido y areas de lectura recreativa. Eso no quita su aire viejo, de diseño gotico y que en algun pasillo al fondo que nadie toca, hay una mancha de humedad en su alfombra. Su aroma enamoraba a los estudiosos y aficionados de la lectura, tambien mareaba en los dias de verano a los casuales.
Termino por huir, respiraba agitada para calmarse.
-Maldita sea- chillo Violet en voz baja. No podia ser tan cobarde, menos cuando a ella le nacio estar en ese club como una actividad alternativa. Debia sobrevivir.

-x-

Es inevitable pensar que una tarde se volveria tan aburrida cuando los examenes estaban a la vuelta de la esquina. Podia estar vagando por las calles, husmeando donde no le era bienvenido o tal vez jugar con el perro del taller mecanico cerca de su apartamento. Es mas claro que el agua en su rostro la pesadez de estar en la biblioteca de la ciudad, pero acordo en estudiar y no defraudar a su padre, como es la costumbre.
Démian tenia una hoja con los nombres de los libros anotados, ademas de sus numeros seriales en caso de perderse. Caminaba con lentitud y una mano en el bolsillo de su pantalon, la mirada en alto y con sus oidos cubiertos por unos gruesos audifonos, que del silencio en ese edificio, se escuchaba la musica estruendosa aumentada el doble.
Por un lado agradecia no tener que hacer nada en casa, por el otro, Démian nunca fue de estudios. El edificio meramente le iba y venia, excepto la deliciosa y morbida curiosidad de jugar entre los estantes, los pasillos, crear fuertes de libros y madera, tomar un bote de basura oxidado, llenarlo de hojas y quemarlo para los inviernos... Un mar de ideas que le proporcionan una sonrisa en su palido rostro. Esa sonrisa aparentaba entre las personas que buscaban libros, creyendo que el tiene una aficion similar a la lectura. Démian a veces les observaba.
-"Creia que nadie venia a estos lugares"- penso.
Se detuvo al momento del riff en la cancion que escucha, no por la calidad, sino por la velocidad junto con la bateria que le provocan cerrar los ojos y golpear con suavidad la madera del estante a su izquierda. Sin darse cuenta, dio otro par de pasos involuntarios y al terminar su solo al aire, abrio sus ojos.
Démian arqueo una ceja: ahi esta otra chica de su instituto. Si, le reconocia por su estrafalario color de cabello. ¿Que carajos hacia en la biblioteca? No tenia una revereda idea, pero estar cabiz baja y escondida no era una opcion.

-x-

Sintio una basura golpearle el rostro, provocando una reaccion inmediata para buscar el objeto que le golpeo segundos atras y de paso ver de donde provino. Vio a un joven, de altura implacable... Si, le reconocia del instituto, no por entrar a clases, claro, sino por verlo vendiendo cigarrillos y porqueria y media. Su sonrisa traviesa le provoco un genuino miedo, mucho mas grande que el de no leer, incluso penso arrepentidamente de haberse separado del grupo.
Démia se quito los audifonos.
-Kaepernick ¿Cierto?-
Ella no responde, fruncio el ceño.
-Me imaginaba a las chicas como tu muy ocupadas en casa conversando con sus amigas por chat o con sus "mascotas" pidiendoles que les compren todo- añadio a secas.
-No, definitivamente me gustan las tardes para mi y no, no tengo ningun novio si a eso te refieres- esperaba estar en lo correcto al contestar, sino, habria quedado como una ignorante frente a alguien que no le causaba gracia estar cerca.
Al momento en que Violet se daba la vuelta para irse, Demian le alcanzo y corta el paso con uno de sus brazos, al ver su mirada, supo que le tiene miedo.
-¿Entonces?
-Nada que te importe -Violet no sabia que hacer.
-Vamos, esta bien, puedes saber primero porque estoy aqui- dijo en un muy amigable tono. Ya habia logrado asustarla y ahora jugaria un poco.
-No lo se ni me interesa.
-Por estudio, increible ¿no crees?
Violet le quita del camino, pero Démian le gano el movimiento al quitar su brazo, provocando que ella cayera al suelo del impulso.
Se aguanto el grito, siendo una completa humillacion lo que esta viviendo en esos segundos: pero ese era su castigo por quejarse del club de lecturas, lo sabe y lo detesta.
-¿Por que haces esto? Digo, lo lograste: ya estoy en el suelo- quejo Violet, conteniendose de hacer un berrinche y llamar la atencion.
-¿Por que estas aqui?- pregunto en respuesta Démian
-Club de Lectura, ¿Contento?
-No era tan dificil socializar- le dio la mano para que se levantase, si, ella iba a ser una persona muy facil de molestar.
Violet le observo, enojada y acepto darle la mano para que le ayudara, era lo minimo que podia hacer. Nunca fue orgullosa realmente, asi que no le nacia ignorarle con ese tipo de gestos.